Ante Canadá, incluso, Scaloni le devolverá la titularidad a Ángel Di María para buscar más creatividad en el último cuarto de cancha, esa que le faltó ante Ecuador por priorizar otros aspectos del equipo y por la intensidad de un rival que será similar este martes.
Desde el título en el Maracaná en 2021, fueron pocas las veces que Argentina no impuso condiciones. Ni siquiera en las pocas derrotas (2) y los contados empates (3, sin sumar los que se definieron por penales). Durante los cuatro partidos que lleva en esta Copa América tuvo más lagunas que en ese proceso.
Las atajadas de Emiliano Dibu Martínez se replicaron en todos los partidos. Siempre hubo una intervención vital para sostener a la Selección. “Uno más y estamos en la final”, dijo el marplatense campeón del mundo besándose el puño en un video compartido por la cuenta oficial de la Selección.
Un choque de polos opuestos
El antecedente cercano del duelo en Atlanta en el arranque de esta Copa América permite hacer algunas conjeturas. Canadá salió a presionar a la Argentina, que sufrió la falta de efectividad que siguió después en todo el torneo en las chances que generó, principalmente corriendo a los espacios.
Será un duelo de estilos, que explican las estadísticas. Mientras Argentina es la selección con más juego elaborado (7,30 pases por posesión y 0,96 metros avanzados por segundo), Canadá apela a una táctica más directa (4,20 pases y 2,13 metros por segundo).
El perfil que le dio a los norteamericanos el DT Jesse Marsch es primero custodiar su arco (solo recibió un gol, el de Venezuela, después de la derrota ante Argentina), pero convive con una inquietante anemia ofensiva: en los seis encuentros que jugó bajo la gestión del nuevo entrenador, solo convirtió dos veces. Así llegó a la semifinal.
“¿Debilidades? Ninguna”, respondió con una sonrisa el entrenador de origen estadounidense, que enseguida disparó una catarata de elogios: “Amo el equipo de Argentina, tienen al mejor equipo del mundo, con el mejor jugador, el mejor arquero, un mediocampo que mueve la pelota, estoy entusiasmado de enfrentar este desafío”.
Fuente: Por Diego Provenzano (para Clarín)